Uno de
los prejuicios más extendidos sobre los
desempleados, es que somos parásitos sociales, que no producimos, que somos un
peso muerto para la sociedad, seguramente según algunas personas deberíamos
estar en campos de trabajo, o
tal vez de exterminio. Este es un prejuicio que en mayor o menor grado
se ha dado en nuestra sociedad a lo largo de los años, parece que actualmente
se ha mitigado bastante y todo gracias a la famosa crisis. Ves, no todo es malo.
No pretendo hacer una
defensa de la dignidad humana ni nada parecido, solamente decir que durante toda mi vida laboral, nunca he
conocido a nadie que esté desempleado por gusto y no quiera trabajar y he
conocido a miles de desempleados. Esta construcción social pesa en las conciencias
de muchas personas sin trabajo, se sienten culpables y se minusvaloran por no
estar trabajando. A medida que pasa el
tiempo su autoestima se ve más y más perjudicada, ya que pierden todos los
refuerzos personales y sociales que supone el trabajo, esto acompañado de una
crisis económica personal.
Vale,
hagamos un análisis frío y objetivo de la situación:
Cuando
una persona se queda sin trabajo, generalmente tiene derecho a cierto tipo de
remuneración por parte del estado; en un primer momento La
Prestación por Desempleo, después El Subsidio en sus diferentes formas y
por último la Renta Básica Ciudadana, en Valencia: Renta
Garantizada de Ciudadanía. Lo que
supone un colchón económico y temporal para conseguir un nuevo empleo.
Ahora hagamos un análisis
subjetivo, pero más beneficioso para nuestra psique, elijamos pensar y actuar mejor, elijamos una actitud inteligente, para
tener mejores resultados psicológicos, al menos a mí me ha funcionado:
"Estamos contratados por el estado para... para hacer lo que
queramos"
Podemos estar esperando a
que nos llamen , tocándonos
las bowlins, o podemos afrontar nuestra responsabilidad; cumplir con
nuestro contrato, un contrato con uno
mismo; crecer profesionalmente y un
contrato con la sociedad, aportar valor a los que nos rodean, a nuestra
familia, a nuestros vecinos, a nuestros clientes. De este razonamiento nació
este blog y el trabajo que realizo en
las redes sociales. Así que estoy contratado, tengo trabajo y cobro todos los meses. Pere espabila que cómo se termine
el contrato y no encuentres otro, lo tienes crudo. No te preocupes que
ya me estoy inventando otro.
Así que
sigo en crisis económica, pero por lo demás, estoy más sano que una pera, tanto
psicológica como profesionalmente. Es un cambio de pensamiento que si lo
ponemos en práctica, poco a poco se convertirá en una actitud, en un hábito muy
saludable para buscar trabajo: Quien pueda, que siga trabajando y comience a
dar a conocer su trabajo.
Esto me
ha hecho pensar en algo que se está poniendo de moda, incluso algunos partidos
políticos lo llevan en su programa, La
Renta Básica, una prestación que daría el estado a todas las personas para cubrir
sus necesidades básicas, independiente de su trabajo, simplemente por existir. Tendría
muchísimas implicaciones sociales. El trabajo se convertiría en un derecho, no
es una obligación. Te podrías dedicar a lo que quisieras, daría igual si suponía un éxito económico o
no. Me surgen muchísimas preguntas y no sé si sería una medida beneficiosa o
perjudicial para la sociedad. ¿Cuál es vuestra
opinión? ¿Qué pros y contras tendría a nivel individual y social?
Solamente
tengo clara una cosa, que en un sistema económico que expulsa a personas fuera
del mercado de trabajo no las podemos dejarlas en la cuneta, porque una persona no solamente aporta trabajo
remunerado a esta sociedad. Mucha veces, aporta cosas mucho más valiosas,
pero que lamentablemente no tienen valor de mercado, o no hay dinero para
pagarlas.
Espero
que os haya gustado y recordad si es así; compartidlo. Espero vuestras ideas y
sugerencias aquí en el blog o contactad conmigo en las redes sociales, todo el
mundo es bienvenido. Un saludo y buena suerte.
El enigma de
la foto.
Este es un juego que os propongo cada semana, cada artículo tiene una foto y os
pido una interpretación, (a responder durante la semana) la que se os
ocurra, nada está bien o mal, nada es incorrecto, yo a la semana siguiente os
cuento, por qué razón la he puesto en el artículo, esta es la foto de la semana
anterior: Despertar
el Deseo.
En la foto se muestra
a una simpática ovejita, la única de todo el rebaño de la que hemos conseguido
despertar su atención. Tenemos unos segundos para explicarle nuestra propuesta y
atraer su interés, antes de que se agache y siga paciendo y siga con lo que de
verdad le importa. Tienes que preparar un pequeño discurso, un elevator pich ,
para que el empleador muestre interés sobre tu propuesta de colaboración y sólo tiene unos segundos.
¿Qué os parece la foto
de esta semana? Una estampa otoñal.